ASESINATOS A LOS MIGRANTES SIGUE EN EE.UU.

La muerte violenta de migrantes azuayos en Estados Unidos no es un tema nuevo. Los casos de Marcelo Lucero y José Sucuzhañay, compatriotas asesinados en 2008, son solo dos ejemplos.

En ambos casos, la investigación determinó que se trataba de intolerancia racial. La última víctima conocida fue el gualaceño Fabián Carreño, quien pereció el pasado domingo en Queens, Nueva York, tras recibir varias puñaladas.

La tarde de ayer, el dolor de la familia Carreño - Bueno se acentuaba a cada minuto, conforme se acercaba el momento de darle el último adiós a Fabián, sus amigos y familiares en Gualaceo, evidenciaban un sentimiento de vacío. 

El cuerpo llegó el viernes  y el velorio se efectuó en la intimidad de la familia en la vivienda ubicada en la calle Cuenca cercana a la plaza Guayaquil. Ayer, por la tarde se cumplió la misa en la iglesia Matriz de Gualaceo y luego se realizó el sepelio en el Cementerio Municipal.
 “Son momentos duros, realmente duros, él estaba por retornar al país, este mes; el destino fue otro y solo Dios sabe el porqué”, relató, su tío, Galo Carreño.

Recordó que su sobrino fue una persona tranquila y alegre, que desde hace 11 años forjaba el anhelado “sueño americano” junto a su padre Wilson y otros familiares. A Carreño, mirar el borroso video de la muerte de su pariente le indigna, por la manera cómo fue asesinado. Fueron varias puñaladas asestadas con saña, asegura. “Ojalá la justicia haga su parte y sean juzgados con todo el peso de la ley para que esos criminales crueles tengan lo que merecen y se siente un precedente”, señaló.

Aunque la causa del ataque aún no está clara y están en pleno proceso de investigación, se sospecha que fue por racismo. El consuelo que tienen es que su padre Wilson podrá estar vigilante que se haga justicia y se sentencie a los culpables. A la fecha no han recibido ayuda del Gobierno, pero tampoco la han pedido, esto ha sido manejado por la familia que contrató a organización1800migrantes.com para que se encargue del proceso investigativo. Sin embargo el ministro del Interior, José Serrano, anunció el apoyo para que el caso no quede en la impunidad.

Su madre Elsa, es la más consternada, aunque habla poco en sus ojos brillosos e hinchados se nota el pesar por lo ocurrido, también la abuelita dice era mi nietito y es una pena lo ocurrido.

 Víctimas

Éste no es el primer caso de un compatriota asesinado en los Estados Unidos, William Murillo, principal de la organización1800migrantes.com, recordó que también de Gualaceo hay otro caso emblemático como el de Marcelo Lucero, cuya familia se solidariza con los Carreño, porque conocen lo que es sufrir la pérdida de un ser querido en esas circunstancias. Isabel Lucero recuerda que desde que ocurrió el asesinato en 2008, nada es igual, incluso la salud de su madre Rosario, se ha deteriorado paulatinamente. “Sabemos por lo que están pasando, no queda más que seguir adelante”, expresó.

Este tipo de actos quedan marcados para toda la vida y cada vez que se enteran que algún compatriota sufre abuso, el dolor se intensifica. “Mi madre no es la misma, desde que ese episodio fatal ocurro, casi nunca sonríe, alegó.

Su progenitora tiene que movilizarse en silla de ruedas y su habla es limitada, la nostalgia por su hijo, es permanente, las lágrimas se le escapan cada vez que mira la urna donde están las cenizas de su hijo, u observa la foto que reposa sobre una vitrina. Ahí, es cuando uno de sus tres nietos, Isaac, entra en acción y con bromas la cambia el semblante. “Solo esperamos que la situación mejore para nuestros migrantes y de hecho que así es porque desde que eso pasó con nuestro hermano hay más respeto, según nos han contado nuestros familiares”, alegó, Isabel.

A pesar de situaciones como esté, la provincia del Azuay sigue liderando los niveles de migración, junto a otras provincias como Cañar, Guayas y Pichincha. Según los datos del INEC de 2010, de los 717.127 habitantes registrados, el 9.8 por ciento residen en el exterior. Otro dato que se menciona sobre el perfil migratorio de los ecuatorianos es Estados Unidos, el segundo país de destino con el 28.6 por ciento, el primero es España con el 45.1 por ciento. 

En cuanto a los juzgamientos para los presuntos traficantes de personas o coyoteros, cifras de la Fiscalía General del Estado revelan que entre 2010 y 2012 se registraron 117 casos, es decir el 41 por ciento a nivel nacional. (JBS) 
EL TIEMPO CUENCA